La piel es muy importante para la salud del cuerpo, ya que es la primera barrera que combate bacterias y virus, mantiene el equilibro de líquidos y regula la temperatura del organismo. Es el órgano más grande y visible que representa casi una sexta parte del peso corporal. Además, la estructura de la piel puede ser un factor significativo en la autoestima de la persona, por ello, es importante cuidarla de la mejor manera. ¿Te gustaría saber los tipos de piel que existen? Sigue leyendo o aprende del tema de manera profesional con nuestra Maestría en Dermatología y Cosmética.
Índice de contenidos
¿Cómo se divide la estructura de la piel?
La piel es un órgano dinámico que cambia constantemente y se compone en tres capas principales: epidermis, dermis y tejido subcutáneo. Cada una de las capas esta formada por varias subcapas. Los anejos de la piel como folículos y glándulas sebáceas y sudoríparas, también juegas ciertos roles en la función global de la piel.
Capas de la piel
La epidermis es la capa externa que puedes ver y tocar. Esta protege frente a toxinas, bacterias y pérdida de líquidos. Consta de 5 subcapas de células llamadas queratinocitos. Estas células migran hacia la superficie de la piel experimentando una serie de cambios.
La dermis es la capa media de la piel, gruesa, elástica pero firme. Consiste de una capa gruesa sobre el subcutis y una capa en forma de onda por debajo de la epidermis.
Así, la hipodermis, la capa más interna, almacena energía y sirve de almohadilla y aislante del cuerpo. Además, contiene células adiposas, fibras de colágeno y vasos sanguíneos.
Tipos de piel que existen
Todas las personas cuentan con una misma estructura de piel, sin embargo, cada piel puede ser seca, grasa, mixta o normal. El tipo de piel se determina genéticamente, pero el estado de la misma puede variar según ciertos factores internos y externos. A continuación, te explicamos cómo se compone cada tipo de piel.
Piel normal
La piel normal hace referencia a una piel en buen equilibrio y es denominada “eudérmica”, en términos científicos. La zona T (la frente, la barbilla y la nariz) puede ser un poco grasa, pero en general el sebo y la hidratación están en equilibro. La piel no es ni grasienta ni muy seca.
Este tipo de piel se caracteriza por tener poros finos, buena circulación sanguínea, textura aterciopelada, suave y lisa. También, tiene una transparencia uniforme de color rosa, fresco, y es libre de impurezas. A medida que envejece una persona con piel normal, su piel llega a secarse más, pero no es propensa a la sensibilidad.
Estructura de piel seca
“Seca” se utiliza para describir un tipo de piel que produce menos sebo que la piel normal. Por ello, la piel carece de lípidos que retienen la humedad y protegen de factores externas. Esto daña la función de la barrera. La piel seca existe en diferentes grados y en formas que no siempre se distinguen claramente entre sí. Esta puede percibirse tirante, frágil y áspera y tiene un aspecto apagado. La elasticidad cutánea es también débil.
La hidratación de la piel juega un papel importante. Esta evita la perdida activa de agua que genera la resequedad de las glándulas provocada por el calor, el estrés y la actividad.
¿Qué es la piel grasa?
La piel grasa es la que tiene una producción acrecentada de sebo, esta hiperproducción se conoce como seborrea. La estructura de la piel grasa se caracteriza por tener poros agrandados y visibles, brillantez, piel engrosada y pálida. En casos moderados y graves aparecen granos y la piel llega a enrojecerse e inflamarse.
Algunas situaciones que producen el exceso de sebo e impurezas son:
- Genética.
- Cambios y desequilibrios hormonales.
- Medicación.
- Estrés.
- Productos para maquillaje que causan irritación
Piel mixta
En la piel mixta, los tipos de piel varían en la zona T y en las mejillas. La llamada zona T puede diferir considerablemente, desde una zona muy delgada hasta una zona extendida. La estructura de la piel mixta tiene una frente, un mentón y una nariz grasienta. También, los poros son agrandados en esta zona y tienen impurezas. Además, las mejillas están entre normales y secas.
Las partes más grasas de la piel mixta se deben a una hiperproducción de sebo. Las partes más secas de la piel son una falta de sebo y déficit de lípidos.
En este sentido, los factores que determinan el estado de la estructura de la piel son el clima y contaminación, medicación y el estrés. También, los factores hereditarios influyen sobre los niveles de sebo y sudor, y los factores hidratantes naturales que produce la piel. Los productos que utilizas para el cuidado de la piel influyen de gran manera. Estos seleccionarse con ayuda de un profesional para que se adapten al tipo de piel y afronten el estado de la misma.